El escape perfecto de una familia imperfecta

 

“La Familia”, así eran conocidos por toda Avellaneda y eso es lo que eran para la gente de la zona, una familia común y corriente. Pero en las sombras era todo lo contrario, son uno de los linajes más conocidos de la mafia internacional. “La Familia” con base en Valentín Alsina tenían redes de venta de sustancias ilegales, de tráfico de armas entre otras tantas cosas ilegales. Estaban en el país desde que llegaron al mismo en el año 1912, y desde ese momento manejaron los negocios ilegales de Buenos Aires sin interferencia de la ley.

O al menos hasta ese momento. En la casa de La Familia el caos se hacía presente, todos los integrantes de la familia corrían por toda la casa como pollo sin cabeza tratando de borrar la evidencia de actos ilegales que estaban por toda la casa. El patriarca de la familia se aseguraba de no dejar nada de extremo valor, la matriarca quemaba en la chimenea todos los archivos que demostraban que la familia estaba metida en trapos sucios, mientras que los adolescentes se encargaban de juntar las drogas esparcidas por la casa y la enterraban debajo de las flores del jardín.

De un momento al otro todos salieron de la casa y todos se subieron a una camioneta blanca con la que se pusieron en marcha hacia al aeropuerto internacional de Ezeiza justo cuando los patrulleros dieron vuelta por la esquina de la calle de la familia. Ya en el aeropuerto, lograron burlar a la policía de inmigración con sus pasaportes falsos y pudieron escapar del país sin ser detectados. O al menos eso es lo que creían.